jueves, 24 de enero de 2013

Leche de vaca si, pero a partir de los 12 meses



Un 17% de los bebés comienzan a tomar leche de vaca antes de cumplir los 12 meses. Un error muy frecuente que cometemos los padres pero poco saludable para nuestros bebés. Vamos a explicar porqué:

 La leche de vaca carece del hierro, cinc, vitamina E y ácidos grasos esenciales que contienen la leche materna y la de fórmula. 

El principal alimento de los bebés hasta los 12 meses es la leche, y esta debe de proporcionarles todos los nutrientes que necesitan para crecer fuertes y sanos. La carencia de hierro en su alimentación podria llegar a producir anemia ferropénica.


 Triplica la cantidad de proteinas que tiene la leche materna. 

Para un bebé esto supone una sobrecarga impresionante para sus riñones, que tienen que trabajar a destajo para filtrar una cantidad de proteínas para la que todavía no están preparados.


 Es la primera causa de alergia en los niños.

La leche de vaca es el alimento que más alergias produce a los niños, aunque por suerte, solo el 15% de los niños que la padecen siguen siendo alérgicos a los 6 años


Por todo ello, la leche de vaca no es recomendable hasta que el bebé cumpla su primer añito. A partir de esta edad, su estomago es lo suficientemente maduro para no permitir pasar a través del intestino cualquier molécula que quiera entrar en su cuerpo produciendo alergias. La falta de hierro y vitaminas se complementa con la ingesta de otros alimentos y la sobrecarga de proteinas ya no supone un problema para sus riñones.
 

lunes, 14 de enero de 2013

Ya reconoce a papá y mamá y solo quiere estar con ellos

Es a partir de los 9 meses cuando los bebés comienzan a reconocer quienes son papá y mamá y la gente de su día a día.
Cuanta más gente conocen, más fácil les resulta acostumbrarse a los desconocidos, pero aún así, en esta etapa separarse de mamá y papá suele generarles inseguridad.



Mi bebé llora en brazos de otras personas

Hasta ahora, el pequeño ha sido muy sociable y alegre, pero a esta edad puede volverse tímido y huraño. 
El llanto en estos casos es su única forma de manifestar su miedo. Miedo a lo desconocido.

No debemos obligarle a quedarse en brazos de alguien que no quiere, aunque lo que si podemos hacer es quedarnos cerca de la persona que le quiere coger, para que el niño tenga mayor seguridad y poco a poco vaya acostumbrandose.

Llora cuando me voy

Si ya llora cuando está en brazos de otras personas estando sus papás cerca, el echo de dejarle sólo con extraños es un momento dificil y de gran temor para ellos. Todavia no tienen noción del tiempo y si algo o alguien no está al alcance de su vista, piensan que no lo volverán a ver.

¿Qué podemos hacer?

No os angustieis, es una etapa normal por la que pasan la mayoría de los niños. Es importante intentar que todos los días pase un rato con otras personas, aunque sea con sus papás delante, para que coja confianza. Luego, será más sencillo que se quede sólo con ellos.
Tambien hay que acostumbrarle a estar solo. En la habitación o en la cuna con juguetes, aunque estemos cerca por si llora o le pasa algo, que él no nos vea.

Cuando llegue el momento de dejarle realmente solo con otras personas: empezaremos por dejarle periodos cortos de tiempo, diciendole a dónde vamos y que volveremos pronto, los papás se tienen que ir con una sonrisa, sin angustiarse por su bebé, porque él lo notará

Es muy importante no irse a escondidas, ni mentirle diciendole que no te vas a ir o diciendole que vuelves enseguida, si no es cierto. Con esto sólo lograrás que desconfie de vosotros y que viva angustiado.

Y sobre todo, hay que pensar que esto es sólo una etapa y que no va a ser toda la vida así, muy pronto de repente se soltará y estará encantado de conocer gente nueva.

miércoles, 2 de enero de 2013

Dar el Biberón

Cuando la lactancia materna no es posible, por el motivo que sea, los biberones son la herramienta imprescindible para alimentar al bebé. Tambien cuando el pequeño crece y se le quiere ofrecer agua o zumo. Es fundamental alimentar al bebé manteniendolo en brazos, mirándole, susurrándole y acaraciándole.



¿Qué necesito?
Para una lactancia cómoda con biberón es imprescindible contar con al menos:
- de 4 a 6 biberones
- varias tetinas
- cepillo para limpiar el biberón
- leche en polvo
- esterilizador

¿Cómo se prepara el biberón?
Sencillo. Se pone el agua en la botella, se le añade la leche en polvo y se comprueba la temperatura de la leche poniendo una gota sobre el interior de la muñeca, que debería de notarse cálida, pero no caliente. Hay que comprobar tambien la cantidad de leche que sale por la tetina, que no salga ni muy rápido, ni muy despacio.

El agua de biberón
Siempre que el agua sea del grifo (y previamente habiendonos asegurado que es potable) es imprescindible hervirla durante un minuto desde el momento de ebullición. 
Si elegimos agua envasada, hay que que tener en cuenta que no todas son aptas para el bebé. Hay que elegir las de mineralización débil.

¿Cómo se da el biberón?
El biberón se da siempre en brazos. Se le aguanta medio sentado y se le introduce suavemente la tetina, que deberá de estar siempre llena de leche, para evitar que el bebé trague aire.

El biberón, tambien a demanda
La Sociedad Europea en Gastroenterología, Hepatología y Nutrición en Pediatría recomienda que el biberón se dé a demanda, tanto en horario, como en cantidad.
Aunque se suela recomendar dar un biberón cada 3 horas, debido a que la leche artificial es de más difícil digestión que la materna y por ello permanece más tiempo en el estómago, no es necesario esperar a que el estómago esté vacío. De echo esto nunca lo sabremos con certeza y no significa que el niño no deba o no necesite comer hasta ese momento.

Higiene adecuada
Sobre todo los primeros meses, es importante esterilizar los biberones y tetinas antes de cada uso.
- Hirviendo en agua durante unos 10-15 minutos
- Mediante el método Minton: este método se vende por regla general en las farmacias y consiste en una cubeta, cuya capacidad es de cinco litros de agua, donde se vierte un tapón y medio del frasco de líquido que viene dentro de la caja, o bien, en la misma cantidad de agua, se pone una de las pastillas. La solución preparada sólo dura 24 horas. En este agua es donde se colocan los biberones.
- Esterilizadores eléctricos: Se introduce el biberón con agua y se calienta. Normalmente sirven para más de uno a la vez.


Los biberones
Plastico: resisten más a los golpes y son más ligeros. Son muy prácticos para las salidas pero como inconveniente hay que señalar que pueden llegar a absorber el color de alguna bebida. Se suelen recomendar para los bebés más mayores.
Vidrio: se puede romper fácilmente y en general se suelen recomendar para los primeros meses. Se asocia con más higiene y mayor facilidad para limpiarlo.

En función de su forma tenemos los de boca ancha que tienen la ventaja de que son más fñaciles de limpiar y los que tienen forma anatómica, estupendos para cuando el bebé puede cogerlos por sí mismo.

Las tetinas
Conviene ir probando las que más le gustan al bebé. Se recomienda revisarlas a menudo y cambiarlas cada cierto tiempo, para evitar que estén deterioradas o frágiles.
Silicona: se recomiendan para los primeros meses porque no se deforman, son más firmes y resistentes y permiten que el bebé se adapte bien a la succión. Aunque algunos niños las prefieren de látex.
Látex: se aconsejan cuando el bebé es mayor, pues ressiten mejor a los mordiscos. Es un material natural que ofrece una gran seguridad frente a los desgarros.

Además, las tetinas se diferencian por la edad para la que están recomendadas y por el líquido que permiten pasar.